En un ambiente lleno de emoción y reconocimiento, la Universidad Miguel de Cervantes celebró la ceremonia de titulación y licenciatura del año 2025. Graduados de todas las carreras, acompañados por sus familiares y amigos, se unieron a autoridades destacadas como el presidente de la Junta Directiva, señor Gutenberg Martínez Ocamica; la rectora, señora Marigen Horkohl Venegas; la Secretaria General, señora Verónica Peñaloza; la Vicerrectora Académica, señora Francisca Ortega Frei; el Vicerrector de Administración y Finanzas, don Mauricio Espinosa; la Vicerrectora de Comunicación y Vinculación con el Medio, señora Rebeca Castro, junto a directores de escuela, coordinadores y empleadores de titulados de nuestra institución.
En su discurso, la rectora destacó el compromiso de la universidad con la inclusión y la equidad, especialmente hacia los estudiantes no tradicionales que han superado múltiples adversidades para alcanzar sus metas académicas. “Hemos apostado por abrir las puertas a quienes, como ustedes, hoy se titulan, muchas veces dejados de lado por los modelos de educación tradicionales”, expresó, haciendo un llamado a reconocer las trayectorias de quienes compatibilizan estudios con trabajo, familia y otras responsabilidades.
La rectora también abordó el desafío de construir una educación superior que responda a las realidades contemporáneas, enfatizando que la excelencia debe medirse por la justicia que promueve y no por la exclusión que genera. “Nuestra universidad ha sido desde su origen un espacio de acogida y transformación, donde cada estudiante encuentra la oportunidad de construir un futuro mejor para sí mismo y para su comunidad”, afirmó con convicción.
Durante la ceremonia, se recordó que más del 20% de la matrícula nacional corresponde hoy a estudiantes mayores de 24 años, trabajadores, cuidadores o primeros en sus familias en acceder a la universidad. “Este fenómeno no es solo estadístico, es profundamente humano, ético y político,” señaló la rectora, reafirmando que la educación es un derecho y una herramienta poderosa para la cohesión social y la equidad.
La Universidad Miguel de Cervantes, fiel a su misión, se proyecta hacia el futuro como una comunidad educativa comprometida con el bien común, la justicia social y la construcción de nuevas oportunidades. En palabras de la rectora, “ceremonias como esta no solo cumplen con una valiosa tradición; constituyen momentos de inspiración y energía para seguir avanzando, con la certeza de que un futuro más justo es no solo deseable, sino posible”.
A nombre de los estudiantes titulados habló Camila Parrado Espinoza quien expresó un profundo reconocimiento y celebración del fin de una etapa académica marcada por la pandemia. Destacó la transformación personal y colectiva, siendo capaces de enfrentar dificultades como el aprendizaje a distancia. Destacó el papel crucial de los profesores y el apoyo incondicional de las familias. Finalmente, se subrayó la responsabilidad futura de los graduados en contribuir éticamente a la sociedad, promoviendo la justicia y defendiendo los derechos humanos.
La jornada concluyó en un ambiente de celebración, orgullo y esperanza, recordando a todos los presentes que cada historia de vida compartida es un testimonio de esfuerzo, resiliencia y transformación.
